"…La Enseñanza del Maestro Omraam Mikhäel Aïvanhov es de una amplitud excepcional y de una elevación excepcional. Responde a la pregunta que nos planteamos sin cesar: cómo vivir.

Aquello que hasta ahora ha sido rechazado por todos los escritores y pensadores, se trata aquí: cómo comer, cómo respirar, cómo dormir, cómo lavarse, cómo mirar, cómo escuchar música…; cómo meditar, cómo desarrollar nuestra imaginación, nuestra voluntad; cómo traer niños al mundo, cómo educarlos; cómo amar, cómo utilizar todas nuestras energías y aumentarlas; cómo reforzarse y regenerarse captando los rayos del sol por la mañana; cómo desarrollar nuestra sensibilidad en contacto con la Naturaleza, cómo respetar todo lo vivo y entrar en relación con las regiones superiores de nuestro ser…

“Son raros los momentos en nuestra vida en los que el descubrimiento de un libro particular, de una enseñanza o de palabras de sabiduría nos asombra y nos deja maravillados, en la gratitud y la alegría. Enseguida sabemos que acabamos de descubrir un inestimable tesoro. En el momento que estamos en su presencia y captamos su resplandor, percibimos inmediatamente la transformación que produce en nosotros. Esto es lo que he sentido al descubrir la obra del extraordinario maestro espiritual búlgaro Omraam Mikhaël Aïvanhov.

En la Historia abundan los relatos consagrados a maestros espirituales. Independientemente de las verdades que estos instructores hayan revelado, muy pocos de ellos han marcado la vida de la gente o del mundo en general. ¿Por qué, entonces, algunos de ellos tienen tal poder transformador? Que una enseñanza espiritual retenga nuestra atención o no, depende, claro está, de nuestra apertura de espíritu, pero también de otros factores. No basta con que la enseñanza sea verídica, debe estar en armonía no solamente con la antigua sabiduría, sino también con los desarrollos más recientes del conocimiento. Debe ser apropiada, oportuna y realizable. Por encima de todo la enseñanza debe, de una manera u otra, responder a las necesidades actuales y tocar en nosotros una cuerda sensible. Si en un momento dado se cumplen estas condiciones, se puede producir un efecto mágico: nosotros, y el mundo que nos rodea, podemos ser transformados.

La enseñanza de Aïvanhov no sólo está en sintonía con las más grandes tradiciones de la sabiduría antigua, sino que se encuentra en la vanguardia de los conocimientos sobre el mundo. En consecuencia los que prefieren las enseñanzas espirituales polvorientas y envejecidas, arcaicas y oscuras, deberán buscar en otro sitio. Aïvanhov no recomienda refugiarse en un pasado sentimental; utilizando plenamente la razón y sus notables poderes visionarios, propone una imagen sublime de la transformación humana, moderna y muy actual.

Las características más llamativas de la enseñanza de Aïvanhov son la simplicidad y la claridad que iluminan toda su obra, Sus palabras, sobrias y simples, ofrecen un contraste refrescante con los propósitos brumosos que pasan actualmente por enseñanzas «espirituales». ¡Qué alegría redescubrir que la sabiduría auténtica no necesita ser nebulosa e impenetrable!

Aunque la enseñanza de Aïvanhov concuerda con la mejor de las antiguas tradiciones de la sabiduría, en muchos aspectos es original y nueva. Obviamente, Aïvanhov era consciente de las adquisiciones de la ciencia moderna. Respetaba esta ventana sobre el mundo y gracias a su notable inteligencia y su profunda comprensión, la amplió aún más. Contrariamente a numerosos instructores espirituales, Aïvanhov no ignoró la imagen moderna del universo, sino que la penetró directamente y la superó. Esta es una de las razones por las cuales su enseñanza se adapta tanto a nuestro tiempo.

Hoy día más que nunca, los supuestos instructores espirituales abundan. Occidente está lleno de ellos y a veces es difícil distinguir al sabio del charlatán. En toda esta feria actual, encontrar a un verdadero instructor puede ser, para la persona en búsqueda de la verdad, una de las empresas más desalentadoras. Es un gran honor y un inmenso privilegio recomendar esta enseñanza. Muy pocas tienen esta calidad. (...)

Se me pregunta regularmente en mis conferencias y mis talleres: « ¿Quién hoy día es un verídico y verdadero instructor espiritual? » Ahora puedo responder sin vacilación: encuentren a Omraam Mikhaël Aïvanhov y observen lo que ocurre."

Larry Dossey
Autor de : Recovering the Soul;
Space, Time, and Medicine; Meaning and Medicine, et Beyond Illness.

El Maestro Omraam Mikhaël Aïvanhov es un representante vivo de su filosofía. No reconocer en él este poder de iluminar, de guiar, de vivificar, de hacer feliz, poderoso y fuerte sólo es posible para los que nunca lo han seguido ni escuchado. Basta vivir la experiencia de ser uno de sus alumnos, para constatar que posee el conocimiento profundo de la ciencia de la vida, que sabe abrir a todos los seres horizontes inmensos de una pureza insospechada. Sabe dar, a los que tienen sed de elevarse y de aprender, una ciencia desconocida, impregnada de una pedagogía y una psicología extraordinarias. Su palabra profundiza en todos los ámbitos de la vida; proyecta una luz fulgurante sobre todas las actividades humanas, situándolas en su nivel, acordándoles la importancia limitada o capital que les confiere su posición en la escala de los verdaderos valores. Demuestra que la naturaleza ha resuelto desde hace mucho tiempo todos los problemas de los que se preocupan los humanos, y aporta la verificación de que estas soluciones a menudo difieren radicalmente de las soluciones que ellos han adoptado. El hace constatar la existencia de esta única filosofía de la que todos los más grandes espíritus de la humanidad, desde los tiempos más remotos, se han hecho transmisores, la cual no tiene nada en común con los sistemas filosóficos inventados por los humanos, puesto que está inscrita en las formas, los colores, las orientaciones y leyes de la naturaleza. Un Maestro así conduce a sus discípulos hacia el respeto de las leyes naturales, de todo lo que el hombre no ha creado, sino que es la obra de su Creador. De esta forma da los medios para no perderse más en falsas vías. En una palabra, enseña a los humanos a vivir en el seno de este Cosmos del que no puede sustraerse.

Georg Feuerstein
El misterio de la luz
Editorial Prosveta

“Omraam Mikhaël Aïvanhov era un hombre sencillo y directo. A veces la sencillez y la franqueza son únicamente la expresión de una falta de sutilidad. En el caso de Aïvanhov, son el fruto de una lucidez mental excepcional y de una gran integridad personal. Presentó las ideas más complejas de una manera sencilla y viva, sin ningún tipo de pretensión que pudiera ser engañosa.

En nuestra época gustan las cosas complicadas. Nos sentimos orgullosos de ser sofisticados y suponemos, en general, que las reflexiones profundas exigen expresiones complicadas. Siempre nos preguntamos si un pensador enrevesado es increíblemente profundo. Aïvanhov prescinde de toda esta pretensión y esta confusión. Sus numerosas conferencias (él mismo no escribió libros) reflejan una sencillez, una lucidez y una profundidad constantes.

Durante los casi cincuenta años de enseñanza, muchos de los que fueron a escuchar a Aïvanhov lo encontraron demasiado simple y fueron a otras enseñanzas y filosofías que les parecían más importantes porque eran más complicadas. La profundidad de sus ideas sólo se descubre cuando se aborda su enseñanza sin esnobismo intelectual y sin ideas preconcebidas. Tal como lo indica el médico y escritor americano Larry Dossey: «La marca de un gran maestro espiritual reside en su capacidad de transmitir la sabiduría con una claridad luminosa tal que parece realmente simple, como si siempre la hubiésemos conocido, como si la poseyéramos todos en nosotros mismos. Un instructor así es Omraam Mikhaël Aivanhov , cuyas palabras nos parecen naturales y verdaderas. En una época en la que se confunde la profundidad con un esoterismo impenetrable, Aïvanhov es un descubrimiento refrescante.»

En la tradición esotérica se cuenta una anécdota según la cual un aspirante un poco presuntuoso fue a ver a un ilustre maestro espiritual para recibir su enseñanza. Cuando el instructor le pidió que barriera el suelo, el joven dudó. Al querer tranquilizarlo explicándole que esa era su enseñanza, el recién llegado se burló de él con aire de desprecio y se fue. No comprendió nada de la lección y no presintió pues nada de una enseñanza que con seguridad lo habría transformado.

En ciertos aspectos, leer las conferencias publicadas de Aïvanhov es como la prueba del barrido. Muchas de sus ideas parecen tan familiares que fácilmente podemos concluir a la ligera que ya las hemos encontrado y superado. Pero hay una gran diferencia entre el hecho de saber algo y el hecho de vivirlo. Las conferencias de Aïvanhov y su vida ejemplar nos recuerdan constantemente esta diferencia fundamental.

Al profundizar más las conferencias de Aïvanhov, se llega a ser humilde ante la inmensa profundidad de su comprensión. Cuando se estudia atentamente su pensamiento y se descubre poco a poco su profundidad y su belleza, nos conmueve y nos transforma.

Louise-Marie FRENETTE
La vida de un Maestro en Occidente
Editorial Nous
(Córdoba, España).

“La gran pasión de Omraam Mikhaël Aïvanhov siempre fue inflamar los corazones y los espíritus. A veces decía que deseaba ser un Prometeo, capaz de robar el fuego del cielo para darlo a los humanos. Su camino personal era el de la Luz, y toda su enseñanza estaba centrada en este elemento fundamental para la vida, que él definía como la mejor representación de Dios para los seres humanos. Explicaba cómo podemos servirnos de ella para transformarnos y llegar a ser radiantes como el sol.”

“Uno de los aspectos más importantes de la tarea de Omraam Mikhaël Aïvanhov en la Tierra ha sido poner las bases de una auténtica fraternidad universal. Durante toda su vida habló de comprensión fraternal, de compartir y de paz. Durante toda su vida intentó hacer comprender a la gente una cosa esencial: la paz sólo se puede realizar en una fraternidad real entre todos los humanos. Debe empezar en los corazones y propagarse después a las familias y a los diversos países del mundo entero.”

“Sus métodos son prácticos, realistas, eficaces. Explica cómo purificarse para recibir energías superiores, cómo transmutar el mal en bien y ponerse en sintonía con los poderosos mundos invisibles que contienen todas las fuerzas del cosmos, cómo armonizarse con los cuatro elementos de la naturaleza y realizar una obra creadora sirviéndose de su poder.